RIVER 2 - 0 ARANDINA.

Cuando el terreno de juego está encharcado y el balón no corre la única opción de llevarte los tres puntos es luchar cada balón y no dar ninguno por perdido. Es lo que ha hecho el RIVER y le ha servido para controlar el partido e imponerse con bastante claridad a los burgaleses. Digno de mencionar el control total del centro del campo que han mantenido Larrazabal y un peleón Izurza todo el partido.
Desde el principio los de Sarriugarte tenían muy claro que el terreno de juega iba a condicionar el partido. Igor Cuesta probaba al meta visitante en el minuto 5 con un disparo lejano cuyo bote se le complicaba al portero y acababa enviando a córner. Desde ese momento el RIVER iba a por el partido. En los minutos 16 y 19 Barrón realizaba dos internadas en el área, una por cada banda, pero ambas acababan con el portero deteniendo el balón.
En el minuto 24 los visitantes tenían una de sus ocasiones más claras en todo el partido cuando su delantero centro se quedaba tras un rechace sólo contra Maguna, que se hacía muy grande ocupando toda la portería, y mandaba fuera el esférico. Poco después eran los verdinegros los que desperdiciaban un claro contraataque tras disparar Barrón y no acertar en su vaselina al portero. Dos minutos después un balón colgado de medio campo por Josu era enviado fuera de un cabezazo por Eneko, cerca del palo.
En el minuto 39 el primer gol de la tarde. Un centro medido de Arri era rematado magistralmente a la escuadra por Oskar Martín ante la estirada del portero. Uno a cero antes del descanso y partido encarrilado.
Nada más comenzar la segunda parte en una nueva falta botada por Josu un barullo dentro del área acababa con un gol en propia puerta de la Arandina, ya que el último rechace pillaba a contrapié al portero. A partir de ahí el RIVER  pudo golear. En el minuto 56 Barrón mandaba alto un nuevo centro de Josu, inconmensurable toda la temporada. En el 60 un balón largo era cazado por Oskar Martín que cruzaba demasiado el disparo al palo largo. 10 minutos después, un pase de la muerte de Josu era enviado demasiado alto por Jokin. En el 79 el portero visitante, el mejor de su equipo, evitaba el tres a cero deteniendo un disparo de Etxaniz.
En el minuto 90 una jugada muy dudosa pudo suponer el dos a uno en el marcador, cuando Maguna no acertaba a detener de primeras el balón y los jugadores visitantes reclamaban gol. Ya en el descuento el árbitro quiso hacerse protagonista y mostró amarilla a Apraiz por una mano involuntaria y dudosa. Suponía la segunda amarilla y el lateral era expulsado.